...Pasos agigantados, lunas perseguidas, y una nube de constelaciones inmortales, frases que sólo puedo imaginar, momentos que se impregnan en la nostalgia, marcando el paso del nudo en la garganta, ¿puedo soportar la noche? Puedo soportar la madrugada, sólo hay algo que no puedo hacer...
siento el frío de mis pasos, las fúnebres disidencias que aprisionan mi corazón,
voy con las heridas expuestas, con el corazón en las manos de sangre teñidas,
con un dolor que me estremece, que se acumula en mis bolsillos gigantes de incertidumbre
caminando por el sendero de la derrota, con el suspiro a cuestas,
escuchando como trueno en la tormenta, el resonar de sus mágicas palabras,
las frases con las que se sepultaron las esperanzas, con las que se dilapidó el sueño,
con la que se mutiló la eternidad y la gloria prometida, que se posó en el vacío de mi alma
caminando por el valle de mi propia desgracia, y ésta vez sí hay lágrimas,
hablo con mi propio espíritu, con mi amasijo de recuerdos, con su sonrisas, con la afonía y la soledad,
voy con un vacío enorme que me saquea la conciencia, que se lleva mi voluntad,
con un beso escondido en las pupilas, con la promesa de eternidad ilesa, con mi sentimiento expuesto,
voy muriendo lentamente, pero sigo en pie, voy con la guerra extinta, con los muertos en la espalda,
y con el sentimiento agigantándose con el paso de los días
0 comentarios:
Publicar un comentario