Ando otra vez perdido entre el horizonte convencional y la naturaleza de lo extinto, asumiendo que lo que se hace día tras día, llega--como todo--a convertirse en un cúmulo de sensaciones extra sensoriales transitorias, plagadas de nostalgia y sentimientos de valencias dobles, como si una fiesta de deprimidos se diera cita, como si un suicida celebrara la vida. Pero se da lugar después de todo, además de ser confusa tiene una sabor tenue y abrumador.
Y luego de ver entre el silencio de las gotas de aquella lluvia de verano y el plácido rechinar del viento en mi soledad, siento que se levanta conmigo una suerte de fe ciega, como un cantante mudo de ópera, como un ciego jugando al tiro al blanco, así de simple con una mano en la vida y la vida en la mano, que no quiere verse comprometido por aquella extraña seducción, y miro entre las paredes y me siento parte de ello, hechos y hacedores en su altísimo juego de composiciones ¿con sentido?
Ando, otra vez sin querer andar, sin saber si lo que hoy me mueve es motriz o emotivo, si es absurdo o complejo, si es más de lo que puedo hacer por ellos, ando ...de andar cansado....
Ando, otra vez sin querer andar, sin saber si lo que hoy me mueve es motriz o emotivo, si es absurdo o complejo, si es más de lo que puedo hacer por ellos, ando ...de andar cansado....
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